Una tragedia sacudió la región del Casanare cuando una embarcación que transportaba 15 personas y carga se hundió en las turbulentas aguas del río, dejando un saldo de tres víctimas fatales. El incidente ocurrió durante la tarde del domingo, desencadenando una exhaustiva operación de búsqueda y rescate que se extendió por más de 24 horas.
Los equipos de emergencia, conformados por el Cuerpo de Bomberos y la Defensa Civil de Hato Corozal y Puerto Rondón, trabajaron incansablemente hasta recuperar los cuerpos de las víctimas. Entre los fallecidos se encuentran Erinson Tabaco Chavitas, de 37 años, su pequeño hijo de tan solo cinco años, Erinson Javier Tabaco Urbano, residentes del municipio de Trinidad, y Luis Eduardo Camejo, de 63 años.
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Luis Felipe Pérez, Director de la Defensa Civil en Casanare y Boyacá, informó que los cuerpos de los dos adultos fueron encontrados durante la madrugada del martes, mientras que el cuerpo del menor fue localizado alrededor de las 7:30 de la mañana. Las víctimas no pudieron escapar cuando la embarcación comenzó a hundirse y fueron arrastradas por las fuertes corrientes del río.
La embarcación, que cubría la ruta Hato Corozal – Puerto Rondón – Arauca, transportaba además una carga de sal. Afortunadamente, 12 pasajeros lograron sobrevivir al llegar a la orilla por sus propios medios, en medio de las adversas condiciones del río.
Las condiciones del río Casanare, conocido por sus aguas caudalosas y corrientes impredecibles, representan un desafío constante para las comunidades ribereñas que dependen de este medio de transporte para su movilidad y comercio.
La comunidad local se ha unido en solidaridad con las familias afectadas, mientras las autoridades continúan evaluando la situación y considerando medidas adicionales para garantizar la seguridad de los habitantes que utilizan el río como vía de comunicación y transporte.
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