Andrea Romero, una profesional de la salud especializada en sueros revitalizantes, vivió momentos de pánico durante un intento de extorsión que casi termina en tragedia en la región de Casanare. Los hechos ocurrieron cuando fue contactada telefónicamente para prestar un servicio que resultó ser una trampa elaborada por delincuentes.
La profesional fue orientada desde Yopal hasta Aguazul bajo la apariencia de un servicio médico legítimo. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que estaba siendo retenida contra su voluntad. Romero logró enviar una alerta crucial a través de sus redes sociales, publicando un mensaje que revelaba su crítica situación: «Me tienen secuestrada, dígale a mi familia que pague sino no le voy a poner sueros a nadie».
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Esta acción estratégica permitió que sus familiares y amigos activaran rápidamente los protocolos de emergencia. Las unidades del Gaula y la Fuerza Aérea intervinieron oportunamente, realizando un operativo que logró rescatar a Romero cuando se encontraba en una zona apartada y sin señal telefónica.
Los delincuentes pretendían obtener un rescate mediante depósitos bancarios, pero su plan fue completamente desarticulado. Las autoridades lograron frustrar la extorsión y poner a salvo a la profesional de la salud.
Tras el incidente, el Gaula reiteró una recomendación crucial para la comunidad: es fundamental extremar las medidas de seguridad al ofrecer servicios a domicilio y verificar rigurosamente la identidad de quienes solicitan trabajos profesionales.
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