El Ejército Nacional completó una operación en Támara, Casanare. Allí lograron desactivar un poderoso artefacto explosivo. Este dispositivo amenazaba gravemente a los habitantes de la zona rural.
La intervención se desarrolló tras alertas de la comunidad. Los residentes informaron sobre la presencia del explosivo cerca de una finca habitada. Las tropas de la Décima Sexta Brigada del Ejército Nacional verificaron la denuncia y actuaron de inmediato.
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El reporte oficial detalla los componentes del artefacto. Contenía 30 barras de indugel y 5 kilogramos de metralla. También incluía 12 metros de cordón detonante y 2 detonadores eléctricos.
Los expertos militares evaluaron el potencial destructivo. El explosivo habría causado daños en un radio de 650 metros. Cualquier persona a menos de 100 metros habría estado en grave peligro.
Para neutralizar la amenaza se desplegó el grupo EXDE. Estos especialistas en destrucción de explosivos aplicaron protocolos de seguridad durante el procedimiento.
Las autoridades atribuyen el explosivo al grupo armado SE28. Esta organización mantiene presencia en ciertas zonas del departamento.