Casanare presente en Cumbre Bicentenario por la Niñez en Boyacá
Que ningún niño, niña, adolescente de la Orinoquia enferme, muera o sea víctima de trabajo infantil, reclutamiento, violencias y explotación sexual, promoviendo el desarrollo integral de sus familias y la protección de sus entornos, mediante el uso sostenible de sus territorios, la conectividad y el fortalecimiento de la capacidad institucional y la gobernabilidad, fueron entre otros los desafíos planteados por la región de la Orinoquía en la Cumbre Bicentenario por la Niñez en Boyacá, que concluyó ayer, con la asistencia del presidente Iván Duque, la primera dama, María Juliana Ruiz, los 32 gobernadores y las gestoras sociales del país.
Para lograr este cometido se propuso en el marco del evento, mejorar la gestión integral de los departamentos de la Orinoquia a través de la asignación de recursos, soportados en un sistema de registro e identificación de beneficiarios que permita la planeación, planificación ejecución y seguimiento de proyectos por objetivos y resultados y el desarrollo de capacidades para la gobernabilidad y mejora de lectura e incidencia de la nación en los territorios.
Dentro del contexto histórico de la Ruta Libertadora, se establece que, la concreción de los derechos de los niños no puede desligarse del trasegar histórico para reconocer los derechos humanos, los que, ya desde la “prehistoria de los derechos fundamentales”, se venían fijando como reglas de conducta o acuerdos entre las fuerzas de poder.
Al celebrar 200 años de la Gesta Libertadora, la realidad actual devela que, en relación con épocas pasadas, las actuales no son tiempos fáciles para los niños, niñas y adolescentes del país, quienes siguen sufriendo los flagelos del maltrato, del abuso, de la exclusión, del desplazamiento, de la falta de garantías para su atención y protección, etc.
Cadena perpetua para violadores y asesinos de niños
Durante la instalación de la cumbre, el presidente Iván Duque ratificó que el Gobierno trabaja con todas las fuerzas y con todas las instituciones, para que haya cadena perpetua para violadores y asesinos de niños.
Tener cadena perpetua no es una discusión, como lo han denominado algunas personas, de populismo punitivo. Esta es una causa que han liderado personas muy valiosas históricamente, como lo hizo Gilma Jiménez. No es una causa de partidos, no es una causa ideológica, es una causa de todos los colombianos”, sostuvo el presidente de la República.
Cifras y Datos:
Según las Naciones Unidas: “Cada día mueren 17.000 niños menos que en 1990, pero más de cinco millones de niños mueren cada año hoy en día antes de cumplir los 5 años”; la mortalidad materna y la mortalidad infantil son actualmente intolerables y reflejos de inequidades en un país de renta media alta, así las cosas, es fundamental erradicar las muertes evitables con acceso a servicios básicos y una alimentación de calidad.
El promedio nacional de muertes en menores de cinco años se encuentra en 13,02 por mil nacidos vivos. Dos terceras partes de los departamentos se encuentran por encima de esta cifra. Las acciones a emprender se basan en la mejora en el acceso a salud, alimentación y salubridad, teniendo en cuenta que las principales causas prevenibles son la Infección Respiratoria Aguda, la Enfermedad Diarreica Aguda y la desnutrición.
Para 2017 el país presentó en promedio 9,10% de nacimientos por debajo de 2.499 gramos, encontrándonos con seis departamentos que afrontan el desafío de mejorar la seguridad alimentaria y la nutrición de la primera infancia. La meta cuatrienio es la reducción de 1.1%, llegando a 8% de casos.
Uno de los determinantes de la salud y el desarrollo de los niños y las niñas es el nivel educativo de la madre y la edad, así mismo, un embarazo a temprana edad afecta la trayectoria de vida de las jóvenes. En Colombia el 19% de las mujeres han sido madres.
“En cuanto a violencia sexual, durante 2017 los datos muestran que el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses atendió 23.798 casos, lo que significa un incremento de 11,2% frente al año anterior. Más aún, entre 2008 y 2016 el Instituto valoró en promedio 21.385 casos al año. La gran mayoría de las víctimas fueron mujeres (85,4% del total) y dentro de ellas, niñas y adolescentes contra las cuales se cometieron el 86% de los casos reportados en mujeres”.
“Otras muertes violentas son los homicidios (775), especialmente crítico para adolescentes hombres, las muertes por accidentes de tránsito (544) y las muertes accidentales (650) que afectan más a la primera infancia. De igual forma, es motivo de gran preocupación la desaparición de 2.745 niñas, niños y adolescentes (Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, 2018)” Bases PND Pacto por Colombia, Pacto por la equidad.
Pacto por la Niñez
Durante la Cumbre ‘Bicentenario por la Niñez’, el Gobierno Nacional y los gobernadores firmaron el Pacto por la Niñez, el cual busca asumir el compromiso en conjunto e histórico para que los niños, niñas y adolescentes se conviertan en el centro de todas las acciones del Estado.
El Gobierno Nacional se compromete a:
En corresponsabilidad con la familia y las comunidades, prevenir los factores de riesgo de vulneraciones para erradicar todas las formas de violencia y explotación contra niñas, niños y adolescentes, a partir del fortalecimiento y la creación de entornos protectores, seguros y garantes de derechos.
Reafirmar los compromisos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible como un marco que permitirá al país alcanzar un desarrollo más equitativo para los niños, niñas y adolescentes para el año 2030. Para ello, la gestión se centrará en referentes temáticos que integran todos los momentos del curso de vida, los cuales estarán orientados a promover la equidad, la inclusión social y a disminuir la brecha entre lo rural y lo urbano.
Trabajar en el desarrollo de esquemas más eficientes que permitan dar respuesta institucional, a partir del contexto territorial, de tal forma que las acciones de acción – Territorio permitan que las niñas, niños y adolescentes sientan que sus voces son escuchadas y se transforme su vida, con énfasis en la descentralización y la conexión a la ruralidad.
Fortalecer la arquitectura institucional Nación-Territorio para la implementación de los acuerdos de paz, que permitan hacer una gestión integral, articulada y focalizada para mejorar indicadores sociales y disminuir la pobreza en los municipios más afectados por la violencia.
Los Gobiernos Departamentales se comprometen a:
Promover procesos participativos formales e informales con incidencia ciudadana en la toma de decisiones y la elaboración de normas sociales, formulación de políticas públicas, asignación de recursos y transparencia en todas las ejecuciones.
Continuar fortaleciendo la capacidad institucional y la gobernabilidad, adecuando la estructura organizacional local, según sea el caso, que permita que la gestión pública sea coordinada, integrada y complementaria, en función de la protección integral de los derechos de niños, niñas, adolescentes y el fortalecimiento familiar.
Promover la garantía integral de los derechos con enfoque intercultural y la construcción de modelos de desarrollo sostenible, priorizando las zonas rurales dispersas, promoviendo la creación y ajuste de los planes y programas generados en procesos participativos dirigidos a las familias, como agentes políticos y sujetos colectivos de derechos.
Fortalecer la cultura del seguimiento y la evaluación permanente de las acciones de política pública para primera infancia, infancia, adolescencia y el fortalecimiento familiar, que permitan medir el avance los indicadores de salud materna e infantil, nutrición, educación, cultura, recreación y la disminución de las vulneraciones de sus derechos.
La jornada cerró con una exposición artística de los protagonistas de la cumbre: Menores de la Mesa de Participación de los Niños, Niñas y Adolescentes de Boyacá, quienes, a través de pinturas, transmitieron sus peticiones a los mandatarios para que mejoren las condiciones de vida de sus comunidades.
Con estas actividades se dio por concluida la edición 25 de la Cumbre de Gobernadores que, durante dos días, también contó con la participación del director de la Casa Editorial El Tiempo, Roberto Pombo, y la Premio Nobel de Paz Rigoberta Menchú, quien, durante su ponencia ‘Infancia, educación y libertad’, afirmó que para lograr un verdadero cambio en los países, los gobiernos deben invertir en educación integral.