Ataque terrorista sacude Arauca: ELN golpea batallón militar cerca de escuela
Tres soldados muertos y 25 heridos en asalto con explosivos a instalaciones del Ejército
En un acto que ha conmocionado a la nación y puesto en jaque el frágil proceso de paz, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) perpetró un devastador ataque contra el Batallón de Artillería de Campaña N. 18 en Puerto Jordán, municipio de Arauquita, Arauca. El asalto, que tuvo lugar en la mañana del martes 17 de septiembre de 2024, dejó un saldo trágico de tres soldados muertos y 25 heridos, algunos de gravedad.
Según informes de la Octava División del Ejército, el ataque se llevó a cabo utilizando una táctica inusualmente audaz: explosivos improvisados fueron lanzados desde una volqueta contra las instalaciones militares. La magnitud de la explosión y la proximidad a un centro educativo con más de 300 menores han elevado la gravedad del incidente, catalogándolo como una clara violación a los derechos humanos y una infracción al Derecho Internacional Humanitario.
Entre las víctimas fatales se encuentran los soldados profesionales Julián Patiño Arango y Bayron Correa Vargas, cuyos nombres se suman a la larga lista de militares caídos en el conflicto interno colombiano. La identidad del tercer soldado fallecido aún no ha sido revelada.
En respuesta se logró la captura de dos individuos que presuntamente acompañaban el vehículo utilizado en el ataque. Estos sospechosos, que se desplazaban en motocicletas, fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para su judicialización.
El general Luis Emilio Cardozo, comandante del Ejército Nacional, se desplazó rápidamente a la zona para asumir el control de la situación y brindar apoyo a los mandos regionales.
La gravedad de la situación se refleja en la evacuación de emergencia de los heridos más críticos. Centros médicos en Arauca, Tame, Yopal y Bogotá recibieron a los soldados que requieren atención especializada, mientras que 21 militares afectados por esquirlas y aturdimiento están siendo atendidos in situ por personal de Sanidad Militar.
El Ejército Nacional ha atribuido el ataque al frente de guerra Domingo Laín Sáenz del ELN, una facción conocida por su actividad en la región. La elección del objetivo y la metodología empleada sugieren una escalada en las tácticas del grupo guerrillero, lo que plantea serias preguntas sobre el futuro de las negociaciones de paz.
El presidente Gustavo Petro, en una declaración que refleja la gravedad de la situación, calificó el ataque como «prácticamente una acción que cierra un proceso de paz con sangre». Estas palabras sugieren un posible punto de inflexión en la política de diálogo del gobierno con los grupos armados.
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